Gabriela Godínez García
La empresa lechera de Guadalajara, mejor conocida como Sello Rojo, está en gran riesgo debido a los malos manejos por parte de algunos de los socios, quienes se han querido apoderar de la misma, haciendo a sus familiares, entre ellos a uno de los socios fundadores con el apoyo de jueces.
Es importante destacar que el tema de crecer puede afectar no solo a la familia de los involucrados como sucede a la fecha, sino a empleados y proveedores directos o indirectos de la lechera.
José Luis González, es actualmente uno de los únicos fundadores vivos de la empresa, la cual formó su padre Don Roberto González, desde sus orígenes en Acatic, Jalisco hace más de 60 años, junto con su hermano Rubén, padre de Rubén y Abraham González Uyeda, quienes se han apoderado de Sello Rojo, inclusive haciendo a un lado a sus propios hermanos.
Mayari González Rodríguez y Paloma González Rodríguez, acompañadas de su madre Josefina Rodríguez, en representación de su padre y esposo, respectivamente, José Luis González, (quien se encuentra con complicaciones de salud), uno de los fundadores de la empresa y el único con vida, especificaron que sus primos Abraham y Rubén se han apoderado de manera hostil y con la complacencia bastante irregular de diversas autoridades en el Estado de la empresa lechera.
“Esto no sólo es un tema entre particulares, sino que evidencia que en Jalisco no hay certeza jurídica para los inversionistas, ya que un socio mayoritario, influyente, con poder político y económico, fácilmente les puede despojar de su patrimonio, como lo están queriendo hacer con mis padres”, advirtió Mayari González.