La venta de ropa de segunda en espacios públicos es una competencia desleal contra la cual el sector formal no puede competir, debido a los bajos costos en los que se comercializan las mercancías, señaló el presidente de la Cámara de la Industria del Vestido de Jalisco, Roberto Santana.

Ante lo que consideró como un aumento en el ingreso de la ropa de paca proveniente de Estados Unidos hacia el mercado local, añadió que la principal fortaleza de la industria del vestir en Jalisco es la calidad de los productos que se ofertan al público.

“Jalisco se ha convertido en un referente de moda a nivel nacional, aquí nacen y se marcan tendencias. Y eso es algo que nos ayuda a mantenernos a flote, aunque la producción y demanda no sea tan alta”.

Comentó que desde hace más de cinco años, la Cámara Nacional de la Industria del Vestido hizo un llamado a las autoridades de la Agencia Nacional de Aduanas de México para limitar o, en su defecto, prohibir el paso de kilos de ropa por la frontera de Estados Unidos, sin una respuesta positiva.

“Lo que nos han dicho es que no es un tema de contrabando, no es un delito y no se puede hacer algo, entonces la ropa sigue entrando, no importa de dónde y cómo venga”, indicó el empresario.

Además de la competencia calificada como desleal por el presidente de la Cámara de la Industria del Vestido de Jaliscootro problema al que se enfrentan los productores de ropa en el Estado es la falta de mano de obra para la realización y confección de prendas, con una déficit del 25 por ciento de empleados.

Apuntó que las nuevas generaciones ya no quieren pasar ocho horas sentados en un taller o una fábrica de ropa, por lo que la base trabajadora que se mantiene en las mil 200 empresas afiliadas a la Cámara son en su mayoría personas de la tercera edad.

En este sentido, agregó que poco a poco la industria textil tendrá que mudarse a la digitalización de procesos por medio de máquinas y softwares que realicen los patrones de prendas, sin la necesidad de personal de manera física, lo que recortará la plantilla laboral, pero a la vez los gastos de producción.